La ciudad de Braga está situada en la parte norte de Portugal, a unos 55 Km al norte de Oporto. La ciudad fue fundada por una tribu celta llamada Bracari y más tarde fue ocupada por los Romanos.
Braga es una de las ciudades más hermosas de Portugal, con gran cantidad de impresionantes monumentos Barrocos, incluyendo uno de los más conocidos del país, el santuario Bom Jesus do Monte, situado en los alrededores de la ciudad.
En la actualidad, Braga es una ciudad moderna con una población joven, con calles ajetreadas debido al comercio y la industria que rodea un bullicioso y atractivo casco antiguo repleto de calles empedradas.
Braga es un exponente de una extraordinaria diversidad de estilos arquitectónicos, ejemplo de ello es su catedral, con estilos como el Románico, el Gótico, el Manuelino (típico de Portugal), y el Barroco, todos ellos unidos con una sorprendente armonía. En su interior podemos encontrar piezas como un órgano barroco, una obra de arte con salpicaduras en oro y adornada con querubines y criaturas marinas.
La fundación de la ciudad romana, en el año 14 a.C., con el nombre de Bracara Augusta, dio origen a una urbe que pronto sería capital de la Gallaecia y que luego desempeñaría un papel notable en tiempos de las invasiones bárbaras.
Braga, que en el siglo III ya fue sede episcopal, fue también capital del reino de los suevos, y ocupó un puesto importante en tiempos visigóticos.
Tras la invasión de los árabes y la conquista por las tropas del reino asturleonés, desempeñó también importantes papeles, especialmente en el terreno religioso, aunque el desarrollo de Santiago de Compostela la eclipsaría momentáneamente.
El papel de la ciudad se asentó de nuevo hacia el siglo XVI, bajo el impulso de nuevos dirigentes eclesiásticos, que hacen de Braga una floreciente ciudad cuajada de monumentos barrocos, en un impulso que se percibe aún en templos y conventos.
Tras los daños de la invasión napoleónica, en el XIX la ciudad retomó su expansión, que prosiguió en los dos siglos siguientes, para transformar a Braga en una de las principales ciudades de Portugal, detrás de Lisboa y Oporto, una población de cuidados edificios que favorecen la llamada del turismo y una activa vida cultural.
Se debe visitar:
- La catedral: Principal sede eclesiástica en Portugal, Braga tuvo una catedral románica que contribuyó al despliegue artístico de este arte en el noroeste de la Península Ibérica. Sin embargo, a lo largo de los siglos han continuado las obras en este monumento, de modo que apenas destaca el románico en la portada principal en cuyo acceso conviven los elementos góticos y románicos, así como la puerta sur, donde perduran tres hermosas arquivoltas, e interesantes capiteles de motivos florales y animalísticos.
El interior, de tres naves, es obra rehecha en el siglo XVIII, y en él conviven elementos dispersos de diverso tipo. En la capilla mayor un altar del gótico final, en la parte posterior una pila bautismal manuelina y -sobre todo- unos órganos barrocos realmente impresionantes, enfrentados uno al otro. En el conjunto religioso hay varias capillas de distintas épocas, entre las que cabe citar las de San Geraldo, la de la Gloria y la de los Reyes. En esta última están las tumbas de los padres de Alfonso I de Portugal, Enrique de Borgoña y Teresa de León, hija de Alfonso VI de León.
El claustro y la portada principal están realizados en el siglo XVIII. En la portada reina cierta desarmonía, no sólo por la mezcla de estilos, sino por disponer las ventanas del hastial en distintos niveles que las de las torres y al incorporar otras anomalías, como el hecho de tener en la torre norte dos huecos para campanas y en la sur sólo uno.
El “Tesoro” alberga una extraordinaria colección de elementos, relicarios, ornamentos y orfebrería en general.
- El monumento más famoso de Braga es sin duda el santuario del Buen Jesús del Monte, con su impresionante escalera barroca.
El santuario está ubicado en la cima de un monte en el extrarradio oriental de la ciudad, a unos cinco kilómetros del centro de la ciudad, donde ya había una capilla en el siglo XIV.
Durante el siglo XVIII, varios obispos abordaron las espectaculares escaleras, que se complementaban con capillas dedicadas al Via Crucis y a las virtudes. Ya en el final del siglo XVIII se iniciaron las obras de un nuevo templo de aire neoclásico, consagrado en 1834. Se trata de una magnífica iglesia, obra de Carlos Amarante, de una sola nave, magnífica luz, con una bella cúpula y un espectacular retablo, de aire teatral, dedicado a la Crucifixión.
- Palacio Episcopal: Entre la Praça do Municipio y el Jardim de Santa Bárbara se encuentra uno de los monumentos más emblemáticos de la ciudad, el antiguo palacio episcopal bracarense, que está clasificado como Inmueble de Interés Público. Fue construido en granito en diferentes etapas a lo largo de los siglos (desde el XIV), pero el estilo que prima en el edificio es el gótico.
La fachada que da al Jardim de Santa Bárbara tiene aspecto de castillo ya que es un edificio medieval, construido por los arzobispos Gonçalo Pereira e Fernando da Guerra; lo que más llama la atención es la torre almenada de tres pisos y las ruinas de una arcada formada por cuatro arcos apuntados.
La parte construida sobre el Largo do Municipio está compuesta por tres alas, y fue construida posteriormente, en el siglo XVI, por los arzobispos Agostinho de Jesús, Manuel de Sousa y Rodrigo de Moura Telles. La última ampliación (una de estas tres alas) fue construida en estilo barroco por André Soares (siglo XVIII) por orden del arzobispo José de Bragança. Esta parte se incendió, y fue reconstruida, albergando en la actualidad la Biblioteca Pública y el Archivo Distrital de Braga. - Iglesia do Populo, De las iglesias más bonitas de Braga. Se encuentra en la Praça Conde de Agrolongo, haciendo esquina con la rúa S. Martinho, y forma parte de la parroquia de S. João de Souto. Es la iglesia del Convento do Pópulo, fundado en el siglo XVI, y mandado construir por orden del arzobispo Frei Agostinho de Jesús.
La fachada es de granito, obra del arquitecto Carlos Amarante en el XVIII, con una portada flanqueada por dos torres que albergan campanas diferentes y sendos relojes. Es de estilo barroco, con influencias manieristas y neoclásicas. Pero lo más impresionante es su interior, con una nave central cubierta por bóveda de piedra y artesonados, y tres capillas laterales además de coro alto. Todas las paredes del interior están cubiertas con unos magníficos azulejos, en tonos azules y blancos, que también se repiten en el interior del convento.
Hay también multitud de óleos y retablos tallados en madera dorada y policromada, de diferentes estilos (barrocos, rococós, neoclásicos...). - Palacio do Raio, declarado Inmueble de Interés Público (IPP). Está considerado uno de los más bellos palacios de arquitectura rococó de Europa, que es conocido también por el nombre de "Casa do Mexicano".
Fue construido en el siglo XVIII por el arquitecto André Soares, aunque remodelado en el XIX (al añadirse los azulejos de la fachada).
Es un edificio muy monumental y suntuoso, con dos plantas de altura y fachada simétrica en la que destaca la profusa decoración que rodea ventanas y balcones. La parte superior está rematada con una balaustrada de granito, y decorada con jarrones.
Actualmente pertenece a la Santa Casa da Misericórdia de Braga.
- Palacio dos Biscainhos, hermoso palacio residencial construido en el siglo XVII. Hoy día, museo. Este palacio aristocrático barroco, con amplias habitaciones de lujo, muestra la vida cotidiana de la nobleza del siglo XVIII, así como numerosas referencias a la vida de otros que viven el lugar: sirvientes, esclavos, capellanes… En la casa se expone una colección de artes decorativas de los siglos XVII y XVIII: mobiliario barroco, cerámicas, porcelanas, cristalería, platería, textiles y pinturas.
Los jardines, inspirados en los jardines franceses del siglo XVIII, son uno de los mejor conservados del barroco. El jardín cuenta con un laberinto de camas de madera de boj . Para embellecerlo, hay ventanas y puertas ornamentales, rematadas por chapiteles o niños con clarines, esculturas, paneles de azulejos, un pabellón, un cenador y dos paralelos monumentales. Entre los muchos árboles existentes, el más importante es un Virginia Tulipero plantado en el siglo XVIII . - Café Viana, el café más emblemático y tradicional de Braga, ya que lleva abierto desde el año 1.858. Se encuentra en los bajos y soportales del edificio conocido como Arcada, en plena Praça da República, sobre la que se asienta su siempre concurrida terraza. Es un sitio muy agradable donde tomar algo, desde un simple refresco, helado o cerveza, a un buen desayuno o merienda acompañado de un trozo de tarta o una pieza de bollería. La decoración del interior del local mantiene el estilo de un café antiguo del siglo XIX, predominando la madera y el mármol.
- Largo do Paço. Esta plaza se encuentra casi enfrente de la Iglesia de la Misericordia, por la parte posterior de la Catedral de Braga. La plaza es peatonal y empedrada, y recibe este nombre porque en ella se encuentra el Palacio de la República Bracarense (hoy sede de la Rectoría de la Universidad del Miño), cuyas tres alas delimitan el contorno de esta plaza.
En el centro hay un Chafariz (fuente) que fue el emblema de la ciudad, apareciendo representada en sus billetes. Fue mandada construir en el año 1.723 por el arzobispo Rodrigo de Moura Teles, y representa sus símbolos heráldicos, formado por un pebetero sustentado por ángeles, y una columna central labrada con seis castillos. Es tradición que los novatos de la Universidad sean bañados en esta fuente al comenzar el curso escolar. - Casa dos Coimbras, levantada en el siglo XV como residencia para el clero, y adquirido por el rey Don Joao de Coimbra. En 1525, decidió construir una capilla privada, bajo el nombre de Nuestra Señora de la Concepción, que sería conocido como la Capilla Coimbra.
En 1906, el Palacio de Coimbra es demolido debido a la construcción del Largo São João do Souto. Se conservan elementos arquitectónicos manuelinos, y el nuevo edificio está construido a continuación con la capilla. Es declarado Monumento Nacional en 1910 .
La Casa de Coimbra cuenta con algunas de las ventanas y las puertas de la vieja mansión, pero se ha cambiado la forma del edificio. La capilla tiene la forma de una torre cuadrada, está cubierta por una bóveda y las paredes tienen cuadros en azulejos. - Avenida da Liberdade, Es una avenida muy ancha, con cuatro carriles de circulación, pero el último tramo (ya casi llegando a la plaza) es peatonal. En este tramo hay numerosas tiendas y locales comerciales de las principales franquicias de ropa (C&A, Zara, Pepe Jeans...), así como el Teatro Circo y alguna cafetería. También hay numerosos bancos de piedra donde sentarse rodeados de parterres de flores de colores muy cuidados y algunos árboles.
Podríamos seguir visitando lugares en Braga, y es qué tiene tantas cosas por ver…
Este año de 2012 ha sido la Capital Europea de la Juventud.
+ INFO: http://www.minube.com/viajes/portugal/norte/braga