La República Oriental de Uruguay, denominada así por su situación al oriente del río Uruguay, está ubicada en la zona templada del Hemisferio Sur. Limita al norte con Brasil y al oeste el río Uruguay sirve de frontera natural con Argentina. Al este, sus costas están bañadas por el océano Atlántico. Al suroeste, el Río de la Plata le separa de su vecina Argentina. Disfruta por tanto de una situación estratégica al ser una puerta de salida de los países de la cuenca del Plata y por ser país puente entre los dos grandes centros económicos de América del Sur: Argentina y Brasil.
Con 176.000 km2 y 3 millones y medio de habitantes, fue llamado la Suiza de América por su prosperidad económica en el siglo pasado.
Uruguay disfruta además de una red fluvial de importancia mercantil y comercial. Los principales ríos son el Uruguay, el Negro y el Río de la Plata con su estuario. El lago Rincón Bonete está en el centro del país, mientras que la laguna Merín está a caballo entre Uruguay y Brasil.
Su amplia costa es otro importante reclamo turístico.
En la época colonial se conoció al país como Banda Oriental. Al redactarse la primera Constitución del país en 1830, se propuso agregar al nombre la referencia al río Uruguay, pasando entonces a llamarse Estado Oriental del Uruguay. Finalmente, en la Constitución de 1918, se consagró el nombre actual. Con el tiempo, el país pasó a ser conocido simplemente como Uruguay, en guaraní “agua del urú”.
HISTORIA
Cuando en 1516 el explorador Juan Díaz de Solís llegó a Uruguay, el territorio estaba habitado por los indios charrúa, que pelearían contra los españoles hasta su casi total exterminio.
En 1520 Fernando de Magallanes llegó al Río de la Plata, y dice la historia que al ver tierra dijo «Monte vide eu», de donde procedería el nombre de la futura capital de Uruguay.(Montevideo). Este territorio fue testigo durante 200 años de las disputas por su control entre Portugal, dueño del Brasil, y España, que controlaba gran parte de América del Sur.
En 1680 los portugueses fundaron Colonia del Sacramento a orillas del Río de la Plata, adelantándose a los españoles, que fundaron Montevideo en el siglo XVIII para frenar a los portugueses. Los primeros asentamientos hispánicos fueron fundados en el siglo XVII por misioneros jesuitas, evangelizadores de los indios, a lo que siempre consideraron, frente a la opinión de reyes y gobernadores, seres humanos.
Fue Hernando Arias de Saavedra, primer gobernador, quien en 1617 descubrió la gran riqueza de las praderas e introdujo los primeros ganados vacunos y caballar. Estos se multiplicaron rápidamente gracias al suelo fértil y al clima templado de la región. Una de las consecuencias, fue el surgimiento de un arquetipo humano, reflejado en todas las artes: el gaucho.
El anhelo por la independencia triunfó gracias a José Gervasio Artigas, máximo héroe de la República del Uruguay, líder y creador de la nación uruguaya.
En 1816 Portugal invadió el territorio uruguayo. El fin del dominio brasileño y el sentimiento patrio encendido por Artigas se materializaron con La Cruzada Libertadora, que culminó en 1825 con la declaración de Independencia.
En 1828 se constituyó el Estado Oriental del Uruguay. Pronto surgieron dos partidos políticos: el Partido Colorado (liberales) y el Partido Blanco (conservadores). Sus enfrentamientos sumieron a Uruguay en la inestabilidad, que ha durado hasta la actualidad.
Hoy día, Uruguay está integrado en el Mercosur, el mercado común de naciones sudamericanas. Sus principales exportaciones son la carne, la lana y el cuero de su amplia industria ganadera. Es uno de los pocos países de Latinoamérica que goza de cierta prosperidad, alta tasa de alfabetismo y que carece de las brutales desigualdades sociales de otros países americanos de habla hispana.
En cultura, Uruguay tiene buenos escritores como Eduardo Galeano, Mario Benedetti, Juan Carlos Onetti.
Una figura de gran importancia en el folclor uruguayo es el del gaucho. El gaucho es el poblador del campo de Argentina, Uruguay y el sur de Brasil, experto en labores ganaderas, que monta su caballo con total elegancia y maestría. Alrededor suyo se ha creado toda una cultura, su manera de vestir –pantalones bombachos, faja roja, boleadoras (utilizadas para cazar), pañuelo al cuello y sombrero-, una lengua propia, un estilo de vida alegre y espontáneo, su bebida, el mate, y su alimento, la carne.
El baile, las canciones y la música, de la guitarra española o del acordeón, son una de las manifestaciones más características del folclor uruguayo. El Pericón es como se denomina la danza popular uruguaya; otros estilos de danzas autóctonas son la Vidalita, la Milonga y la Payada, el famoso candombe, comparsas que se bailan al son de los tambores.
La gastronomía uruguaya se basa sobre todo en la carne. Las vacas son numerosas en el país, que presume, junto a Argentina, de producir una de las mejores carnes de vacuno del mundo. Hay que disfrutar de asados, carne a la parrilla o entrañas, acompañadas de verduras fritas o guisadas o de la popular salsa chimichurri.
Otros platos muy típicos son el chivito, un bocadillo de carne con queso, lechuga, tomate, panceta y condimentos. Y para acabar, el tradicional dulce de leche.
Los uruguayos beben mucho mate, más que los argentinos o paraguayos. El mate es una infusión de hierbas que tiene un ritual muy especial. La yerba mate se introduce en una calabaza seca y por medio de una 'bombilla' se absorbe tras regar de agua caliente la yerba. Tomar mate es compartir con alguien un rito social. Desde Buenos Aires (Argentina) se pasa a Montevideo en poco más de 3 horas tomando un ferry(Buquebus). Así pasamos nosotros y luego visitamos Colonia, Punta del Este, Rocha, etc.
+ INFO: http://www.turismo.gub.uy/index.php?option=com_content&view=article&id=744&Itemid=603
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