Sigiriya es uno de los siete lugares del patrimonio mundial de la humanidad en Sri Lanka y uno de sus destinos turísticos más populares. El lugar donde se encuentra Sigiriya consiste de una inmensa roca de granito de 180 metros de altura, cuyos lados son tan empinados que en algunos puntos sobresale la parte superior de la base. En la parte superior del sitio hay un complejo de palacios.
A mitad del camino a la cima, hay un gigante par de patas de leones, que son los restos de una enorme cabeza de león, cuya boca abierta servía como entrada al palacio real. Las ruinas del jardín, que consta de dos fosos y varios charcos, rodean el complejo del palacio. Este hermoso lugar es un gran potencial para el turismo y muy visitado.
Sigiriya es una fortaleza de rocas antiguas y piedras inmensas ubicada en Matale, en el centro de Sri Lanka. Su ubicación es única porque se encuentra rodeada por restos de inmensos jardines, represas y otras estructuras.
Kasyapa, el rey parricida, mandó construir en la roca roja de Sigiriya una ciudadela, una capital, un palacio y un jardín suspendidos. Hay que subir hasta este nido de águilas construido en el s. V. Destacan el fresco de las Doncellas y la vista panorámica de la perspectiva de los jardines en terraza.
La verdadera identidad de las mujeres en estas pinturas todavía no ha sido confirmada. Algunos creen que son las esposas del rey, mientras que otros piensan que son mujeres que participan en las celebraciones religiosas.
Sigiriya, considerada como una de las ocho maravillas del mundo antiguo, consiste en un antiguo palacio construido por el rey Kasyapa durante el siglo 5 d.C. .Contiene las ruinas de un palacio situado en la parte superior de la roca, una terraza de medio nivel que incluye la Puerta del León y el muro de espejo con sus frescos, el palacio inferior, que se interna bajo la roca, además de los fosos, muros y jardines que se extienden por cientos de metros desde la base de la roca.
El sitio es al mismo tiempo un palacio y una fortaleza. Hay suficientes restos como para impresionar al visitante con una arrebatadora visión del ingenio y creatividad de los constructores.
El palacio superior, en la cima de la roca, aún tiene cisternas cortadas en la roca, en las que aún se puede hallar agua. Los fosos y murallas que rodean el palacio inferior se encuentran ricamente ornamentados.
Sigiriya fue nuestra primera visita en Sri Lanka, un lugar que inspiraba paz y tranquilidad y era la antesala de todo lo que nos quedaba por ver en el viaje.
+ INFO: http://101lugaresincreibles.com/2011/01/sigiriya-el-volcn-que-se-convirti-en-palacio.html
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